Si alguien alguna vez me preguntó qué era para mí un reencuentro, seguramente, respondí que era ver a alguien después de mucho tiempo. Hoy, sin embargo, me di cuenta que reencontrarte con alguien no es verlo. Reencontrarte con alguien es darte cuenta que, a pesar de todo lo que haya podido pasar en algún momento, esa persona sigue siendo para vos lo que era. No nos damos cuenta, pero cuando nos dejamos de ver por mucho tiempo con alguien nos olvidamos de ciertas cosas que nos pasaban o nos hacía sentir. Es raro, estando juntos de nuevo me acordé de un montón de cosas que vivimos y me di cuenta que no es lo mismo, que cambiamos, que no somos lo que éramos para los demás pero que entre nosotros siempre vamos a hacer los mismos y que los extrañaba. Ya no nos une lo que antes nos unía, pero estamos, y estar es lo más importante que puede pasar. Sí, estamos… no nos quedamos con las ganas, no dejamos las cosas en un tal vez, no dejamos pasar el tiempo sin vernos (okei, sí dejamos pasar muchísimo tiempo, muchísimos meses). Por lo menos yo creo que me hizo bien, fue como un viaje en el tiempo. Fue la sensación de satisfacer una necesidad que ni siquiera yo sabía que tenía. Al fin y al cabo, las personas importantes son esas que siempre quedan guardadas. Y es seguro que mis personas importantes, siempre, pero siempre, van a quedar guardadas ♥
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