
Te molesta, y sí, te entiendo: a nadie le gusta que le digan cosas que no concuerdan con las decisiones hechas.. Pero la verdad es que no es bueno el reencuentro porque te cruzo y siento esa necesidad de saber un poco más de mí y de vos, del nosotros ajeno a cualquier sentimiento opuesto.
Y después la realidad que se cruza y me hago a un lado. Me equivoqué, no cumplí con la promesa.
Ojalá me odiaras, ojalá pudiera odiarte yo también y eliminarte para siempre de mi vida... Pero no, no puedo ni siquiera dejar de escucharte, te odio y te necesito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario